Encerrado entre paredes, con los brazos atados y la mirada perdida, todos me creen loco. Cuando miran por la pequeña ventanilla y el grueso cristal, me ven acurrucado, dando botes o acostado en el suelo. Qué otra cosa podría ser sino un loco. Idiotas. Cómo explicarles que soy un elegido, un enviado llamado a liberarles del dolor y la pena. Pobres infieles, no hablan mi idioma, no entienden nada. Dicen y no escuchan. Sólo repiten sus palabras preferidas: murder, La Base, muslim shit. Pobres, están locos.En una época donde triunfa lo audiovisual y el tiempo es un bien escaso, los microrrelatos actualizan la tradición del cuento y ofrecen grandes historias en sólo unos segundos de lectura. En estos tiempos de escasez de tiempo, algunos optamos por la brevedad como forma de expresión, aunque las palabras justas de las historias breves requieran amor desmedido por la concisión.
09 octubre 2009
La Base
Encerrado entre paredes, con los brazos atados y la mirada perdida, todos me creen loco. Cuando miran por la pequeña ventanilla y el grueso cristal, me ven acurrucado, dando botes o acostado en el suelo. Qué otra cosa podría ser sino un loco. Idiotas. Cómo explicarles que soy un elegido, un enviado llamado a liberarles del dolor y la pena. Pobres infieles, no hablan mi idioma, no entienden nada. Dicen y no escuchan. Sólo repiten sus palabras preferidas: murder, La Base, muslim shit. Pobres, están locos.
La verdad es que hace tiempo que no escribía un microrrelato tan enrevesado. Aunque no sé si es buena costumbre, voy a dar un par de pistas, en forma de traducción:
ResponderEliminarMurder: Asesino (en inglés).
Muslim shit: Mierda musulmana (en inglés).
Un saludo.
Brillante como siempre, tus relatos me transportan.
ResponderEliminarSaludos
Es maravilloso lo que escribiste.
ResponderEliminarNo es enrevesado.
Pinta un cuadro de realidad mundial estremecedor.
Y en la brevedad, se potencia el talento del autor para transmitirlo...
Tiene una carga tremenda y explosiva, si cabe la metáfora, en el contexto de tu relato (creo que cabe...verdad ?)
Un beso enorme, lleno de admiración, Raúl.
Sí, Sil, claro que cabe la metáfora. Lo has captado.
ResponderEliminarGuantanameraaaa... maldita Guantaneameraaaaa.... Guantanameeeeeraaaaa....
ResponderEliminarPues nada, que si nos tenemos que acostumbrar a uno a la semana en lugar de dos, pues nos acostumbramos. Mientras mantengan el nivel, yo no me quejo.
Un saludo.
Pues sí, ya es una "demencia" erigirnos en "ellos", "nosotros", encerrados cada cual en nuestra propia "base" en imposible diálogo.
ResponderEliminarSaludos
Merce
Pues yo no sé cómo valorar el relato.
ResponderEliminarNo es el mejor de los tuyos (en mi opinión) y en cambio es sin duda uno de los más tuyos.
Difícil.
Y tal.
Si...locos con lavado de cerebro o extremistas...uff!
ResponderEliminarSaludos de la chica marciana.
Víctor, la verdad es que como ya dije hace unos días, la vida me da pocas treguas literarias últimamente. Ojalá pueda recuperar el ritmo de dos a la semana.
ResponderEliminarUn saludo, escritores negros y gracias por la visita. Lo del intercambio lo estudiaré, aunque soy de pocos enlaces... para evitar problemas.
Saludos, Merce, de eso se trata, de ellos, de nosotros, de ellotros y nosellos.
Citopensis, si te soy sincero, a mí tampoco es de los que más me gusta, quizá de los que menos.
Chica, vaya mezcla, ¿verdad? Qué miedo me da el fanatismo.
Esta es la pura realidad, ahora en el estado actual de las ideologías políticas o religiosas y en otros tiempos en las costumbres sociológicas, psicológicas, ..etc.
ResponderEliminarCada elegido ve siempre al loco al otro lado del cristal, da igual si ese está o no en libertad.
Al igual que siempre genial.
De alguna forma siempre me despiertas,por favor no dejes de escribir. Un saludo. Rosa