La gente se echó a la calle armada con cacerolas, pitos y palos. Enseguida empezaron a arder coches y contenedores; a caer semáforos, farolas y carteles. Los escaparates se hicieron trizas, las puertas de los centros comerciales se abrieron a la fuerza y las patrullas de la policía huyeron entre pedradas. La gente dejó de trabajar, se echó a la calle y lo llenó todo de barricadas y hogueras, mientras se desgañitaban pidiendo más orden y más seguridad.20 febrero 2009
La protesta
La gente se echó a la calle armada con cacerolas, pitos y palos. Enseguida empezaron a arder coches y contenedores; a caer semáforos, farolas y carteles. Los escaparates se hicieron trizas, las puertas de los centros comerciales se abrieron a la fuerza y las patrullas de la policía huyeron entre pedradas. La gente dejó de trabajar, se echó a la calle y lo llenó todo de barricadas y hogueras, mientras se desgañitaban pidiendo más orden y más seguridad.
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20 comentarios:
el fin justifica los medios? a saber :)
como la vida misma, hacemos la guerra buscando la paz, increíble
esperanza aguirre nos volverá así de locos
Somos personas contradictorias en un mundo de contradicciones.
Como siempre, magnífico. Un saludo
Centrifugado, ¿quién lo sabe? A veces uno tiende a pensar que sí, pero otras veces no. Lo que sí debe existir es coherencia entre el fin y los medios.
Txispas, así es de absurda la vida que nos regalamos cada día. Guerras en nombre de la paz, ¡qué contradicción!
Sero, a veces me alegra vivir tan lejos de Madrid.
Marido, exactamente: este es un microrrelato sobre las contradicciones de la especie. Una metáfora de nuestro comportamiento absurdo.
Antagónicos...a veces es así.
Muy bueno.
Saludos de la chica.
Son como niños
Gracias, Isabel por seguir pasando por aquí a leer un poco.
Stultifer, efectivamente, somos como niños.
A mí me recordó a Einstein :S
Lala, ¿por la teoría de la relatividad?
Muy bueno, pero a veces tenemos q gritar mas fuerte q el ruido para poder ser escuchados, lastmosamente...
Tienes razón Carlos, que no se entienda este relato como una crítica a toda protesta ciudadana. Porque no lo es. Se trata de una metáfora sobre la incoherencia humana.
Qué sería de nosotros sin nuestras contradicciones? Muy bueno, como siempre. Un abrazo.
Siempre me han dado miedo las concentraciones eúfóricas y caldeadas, porque llevan la sinrazón por bandera. Aún pidiendo agua con el vaso roto.
Un saludo
La turba que no razona... se me vienen a la memoria las imágenes de un reciente linchamiento creo que en Bolivia. Son los peligros de la masa.
Qué puta paradoja, coño ya.
Siento lobsceno de mi lenguaje, oiga. Es lo que tiene trabajar para el orden y la seguridad mientras pido más delincuencia...
Venga, va... ¡un saludo!
Estertor, sobran las disculpas
Muy bueno!
hola hiper y todos, si os apetece ver un video interesante pasaros por exteriores, más sobre el humano que nos habita
un beso
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