29 junio 2009

Mariam y Yosefyah

Yosefyah salió a las tantas del trabajo, molido como un zurrón, con las manos llenas de astillas y varios cortes superficiales. En la puerta de casa, se sopló el serrín que se acumulaba en sus cejas y entró en silencio. Por eso escuchó tan nítidos los gemidos de Mariam. Asido al formón, se lanzó hacia el dormitorio. Cuando abrió la puerta, allí no había ninguna paloma.

27 junio 2009

B-52


El piloto del bombardero B-52 siempre regresaba a la base con una enorme sonrisa. Pensaban que era un sádico, pero las bombas las tiraba al mar.


22 junio 2009

Amor periódico

Las mismas calles te ven siempre pasar desde hace treinta años, los mismos comercios, la misma gasolinera y la misma dependienta en el mismo quiosco junto al trabajo. Cada día te ha entregado tu diario con una sonrisa y cada día, desde que teníais veintipocos años, un hormigueo de placer te ha recorrido la espalda en ese preciso y precioso momento. Te gusta y nunca se lo has dicho a nadie. Tu secreto sólo lo saben los 8.317 periódicos que compraste por amor y nunca leíste.

19 junio 2009

Caza

Primero fue el ruido de ramas y hojas quebradas, después llegó el jabalí. Ahora sólo veo las copas de los árboles y un cielo blanco. Tengo fuertes latidos en la pierna derecha y noto un desconocido dolor en el mismo costado. Por la cara me chorrea barro con sabor a sangre, pero no pienso apartar la vista del cielo. De dónde habrá salido ese jabalí. Quién coño me habrá disparado con postas.

13 junio 2009

Bañado en

Te sienta de maravilla aquel vestido de Versace, la pena es que en la proa de un yate de 20 metros no haya vestimenta más adecuada que ese bikini de D&G con cristales de Swarovski. Estás preciosa, me pasaría la vida contemplándote, como a un diamante perfecto. Le he pedido al maitre que nos acerque unas copas de Möet & Chandon. Vamos a brindar por nosotros. Te amo. Eres perfecta… ¿cómo decías que te llamabas?

08 junio 2009

Destino

Cuando el astronauta tocó tierra pensó que todo había terminado. Lástima que a cientos de kilómetros de la superficie del planeta un pequeño error de cálculo cambie tanto de tamaño. A los enawene nawe les gustó aquel deforme huevo blanco y le prepararon una cordial bienvenida al hombre pájaro. Cuando el jefe abrió la maloca, Sergéi dudó unos segundos antes de darse la vuelta y coger una piedra para destrozar el localizador vía satélite de su cápsula. Enseguida volvió, sonriente, a sentarse junto a la bella Keteoko.

05 junio 2009

Evolución

El mono saltó el foso que lo separaba de la libertad y se dio felizmente a la fuga. Tras deambular durante horas por las calles desiertas de la ciudad, al alba fue a dar con el ayuntamiento. Entró por una ventana y recorrió nervioso varios pasillos oscuros hasta que empujó la pesada puerta de la Alcaldía. Le gustó el gran despacho y se echó a dormir en el mullido sillón. Nadie se dio cuenta del cambio.

01 junio 2009

Diligencia

La diligencia levantaba todo el polvo del camino y sus pasajeros se bamboleaban serios, sin dirigirse la palabra. Miraba al suelo la muchacha que viajaba hacia su boda; miraba al techo su padre, hombre recio de enorme bigote gris; miraba a la izquierda el imberbe del maletín y el sombrero negro. No miraba el ciego, absorto mientras movía las cuentas de su rosario. Al cruzar el riachuelo, una gran piedra trancó la rueda e hizo caer al hombre recio, quien, asustado, desenfundó su pistola. Otro tirón de los caballos sacudió su mano y apretó el gatillo. La bala atravesó la nuca del joven que llevaba las riendas. El ciego paralizó su rosario y la muchacha empezó a llorar. El imberbe se quitó pausadamente el sombrero, miró a los ojos aterrados del padre y habló:
-Usted no conoce la Ley, pero tranquilo, me llamo Calvin y ya soy su abogado.