El personaje de microrrelatos tiene una vida perra. A veces guapo, pero casi siempre feo y contrahecho. Más pobre que rico. Conoce bien el desamor, la violencia, la maldad, el engaño, el desempleo, la guerra, la cárcel, el hambre, la enfermedad y la sed. Ha recorrido mil lugares que no conoce. Ama demasiado, pero funda pocas familias y menos amistades duraderas. Dice que tiene escasa continuidad vital y repite: qué difícil es existir sin edad. Quizá por eso se suicida tanto y tantas veces se deja asesinar. Sin suerte. Hastiado del cielo y del infierno, hoy, definitivamente, me lo ha pedido: eugenesia o eutanasia.
26 febrero 2010
19 febrero 2010
Verosimilitud
Cuando mi editor me reprochó que todas mis historias tienen siempre finales trágicos, muy duros o demasiado tristes, me quedé callado. Tiene toda la razón. Por eso he decidido regalarle una nueva etapa con buenos finales felices. Me estoy documentando. Aprendo nuevo vocabulario y algunos conocimientos técnicos. Quiero verosimilitud. No es tan fácil pasar del realismo a la ciencia ficción.
15 febrero 2010
12 febrero 2010
Aguantó
El gordito aguantó collejas como todos los días, pero cambió la rabia por una sonrisa extraña. Aguantó igual los insultos, los cánticos soeces y los intentos cotidianos por desnudar su enorme culo blanco. Aguantó riendo en silencio, con una mueca entre la burla y la felicidad oscura. Aguantó tranquilo, abrazado a su maleta de Punisher, ajeno a las provocaciones de sus nunca compañeros de clase. Esperó su momento aferrado a aquella mochila negra. En su interior, ni rastro de libros o material escolar, sólo la pistola de papá.
05 febrero 2010
Esternocleidomastoideo
No conocía tu nombre, ni siquiera te ubicaba en este mundo. Ahora estoy seguro de que no te voy a olvidar jamás. Ni a ti, ni a la imagen de aquella hoja de cuchillo. En cuanto la vi volar hacia mi cuerpo, pensé que iba a morir. El tajo fue profundo, como el dolor, y la sangre manó sin descanso. Así es la muerte, imaginé mientras me agarraba el cuello y me aferraba a la vida. A milímetros de la arteria carótida. A milímetros del final. A ti te seccionó casi al completo, pero me salvaste. Qué oportuno descubrimiento anatómico. Bendito músculo esternocleidomastoideo.
01 febrero 2010
Increíble
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